Jardines históricos que no puedes perderte en Sevilla

Sevilla cuenta con muchos atractivos: monumentos, edificios históricos, plazas con encanto y, por supuesto, numerosos jardines. En estas zonas verdes, visitantes y lugareños podrán disfrutar de un rato de paseo, hacer deporte o simplemente desconectar.

La ciudad hispalense es una de las que más espacios verdes tiene de todo el país. Repartidos por toda la urbe, algunos de estos jardines son considerados históricos (cuentan con más de mil años de antigüedad), por lo que no solo sirven como zona para poder echar un buen rato, sino que, además, son parte de la historia y cultura de Sevilla.

¿Quieres hacer una ruta verde por Sevilla? Aunque tiene muchos más, en este artículo hacemos un repaso a los jardines históricos que posee la capital andaluza: Jardines de las Delicias (Parque de Mª Luisa), Jardines de los Reales Alcázares, Jardines de la Buharia, Jardines de la Torre de Don Fadrique y Jardines de la Caridad. ¡Apunta!

Jardines de Murillo

Los jardines de Murillo se localizan en el histórico barrio de Santa Cruz, cerca de la muralla del Alcázar. Con una extensión de más de 8.500 metros cuadrados, se sitúa como un lugar idóneo para hacer un alto en las visitas.

En ellos encontraremos puntos exactos muy emblemáticos: la plaza de Refinadores, en la que se encuentra una estatua del personaje Don Juan Tenorio (de la obra de teatro de José Zorrilla) o la glorieta dedicada al pintor sevillano José García Ramos.

Como curiosidad, ¿sabes por qué se llaman “de Murillo”? En un principio estos jardines pertenecían al Alcázar y se encontraban anexionados a la Huerta del Retiro. Más adelante, se donaron a la ciudad y es entonces cuando se le dio su nombre actual, ya que se encuentran cerca de la Plaza de Santa Cruz, lugar de entierro del pintor Bartolomé Esteban Murillo.

Jardines del Real Alcázar de Sevilla

Estos jardines son uno de los más antiguos de Sevilla, ya que su historia está ligada a la del Alcázar. Podrás acceder a ellos si visitas este conjunto monumental.

En su superficie de aproximadamente 70.000 m², podemos encontrar más de 170 especies de plantas diferentes. Algunos de los lugares esenciales si decides visitarlo son el Estanque de Mercurio, el Jardín de la Danza, el Jardín de las Damas y el Patio del León.

Jardines de la Buhaira

Con 35.000 m² de extensión, los Jardines de la Buhaira son uno de los más extensos de Sevilla. Se encuentran ubicados en la avenida de Eduardo Dato, en el barrio de Nervión.

Su origen se data en tiempos de Al-Mutamid, rey de la taifa de la entonces ciudad. Más delante, bajo el mandato de su sucesor, Abu Yacub Yusuf, se incluyen plantaciones de olivo, palmeras y viñas, ampliando el jardín. La idea era crear un conjunto que fuese parecido al de Medina Azahara.

Declarados en 1999 Bien de Interés Cultural, no puedes perderte el pabellón neomudéjar de Aníbal González (arquitecto de la Plaza de España), la pequeña alberca, la portada de las Almenas y las ruinas del antiguo palacio de la Buhaira, que da nombre a estos jardines.

Jardines de las Delicias – Parque de María Luisa

Los Jardines de las Delicias, también conocidos como Jardines de Arjona, forman parte del gran Parque de María Luisa.

Esta zona verde fue diseñada por Don José de Ávalos y Don José Manuel de Arjona y fue remodelada en el siglo XIX, cambiando los originales árboles frutales por unos de tipo ornamental.

Más adelante, en 1929, se llevó a cabo otra remodelación, con el fin de incluirlos en la Exposición Iberoamericana que llevó a cabo ese año.

El Parque de Mª Luisa fue el primer parque urbano de la ciudad y está considerado como su gran “pulmón verde” (cuenta con una superficie de unos 458.000 metros cuadrados). Con una ubicación privilegiada, en pleno centro histórico y junto a la Plaza de España, se ha convertido en una de las visitas imprescindibles de Sevilla.

Su historia está ligada a la realeza: en su origen formaba parte del Palacio de San Telmo (actual sede de la Presidencia de la Junta de Andalucía), propiedad de la infanta María Luisa, quien lo donó a la ciudad a comienzos del siglo XIX y pasó a ser parte del patrimonio urbano.

Jardines de la Torre de Don Fadrique

Cerca de la calle Santa Clara se encuentra la torre que da nombre a estos jardines. Edificada en 1252 en las huertas del palacio de Don Fadrique, constituye una muestra de arquitectura de la transición del estilo románico al gótico.

A principios del siglo XX, en 1920, el ayuntamiento de Sevilla se queda con lo que quedaba de esta zona y realizó unas obras de rehabilitación que consistieron en excavar hasta el nivel original de la torre (lugar en el que se emplazó el Museo Arqueológico Municipal), así como sus alrededores, que es donde se transformó el pequeño huerto en un jardín.

Hoy en día, merece la pena acercarse y dar un paseo entre setos de arrayán, naranjos, olivos y un enorme laurel (que algunos consideran el más antiguo de Sevilla).

Jardines de la Caridad

Los Jardines de la Caridad se encuentran cerca del Teatro de la Maestranza, en el Paseo Colón. Estos jardines se encontraban en un estado avanzado de abandono y no fue hasta finales del siglo XIX cuando el Hermano Mayor de la Caridad solicitó su cesión al ayuntamiento para convertirlo en un jardín. A principios del 1990 la propiedad se transfirió a la Diputación de Sevilla que, a su vez, se la cedió al Ayuntamiento en 2004.

Aquí se puede admirar la estatua dedicada a Miguel de Mañara (hermano mayor de la Santa Caridad de Sevilla durante el siglo XVII), una obra póstuma de Antonio Susillo, un afamado escultor.

Estos son solo algunos de los jardines de Sevilla que puedes visitar, ya que la ciudad cuenta con más de 30 zonas verdes y/o ajardinadas de las que disfrutar dando un paseo o admirando sus estatuas, glorietas e incluso azulejos o arquitectura. Restos de palacios y de torres, rincones llenos de encanto que no puedes perderte si vienes a la ciudad.